COLONIZACION
DE RENOVA parte IIIª
Cap 53
Cap 53
Sixta y
Caduf, contemplaban la entrada de un meteoro en la atmósfera de Renova. La dirección
que tomaba atendiendo a su estela, era la del Océano. El ruido ensordecedor que
provocó, asemejaba a un prolongado trueno. No acababa de desintegrarse,
mientras que enrojecía su cabeza. Era un meteoro inusual. Una vez desaparecido
de su vista, presumieron su caída en las aguas profundas del Océano aún no explorado.
Acto seguido,
recibían un mensaje ininteligible de Nen. Por algún motivo se mezclaba con
interferencias, con lapsos de silencio y frases sueltas.
Parecía que
se dirigía el mensaje a Axel, por lo que Sixta lo reenvió a Axel en Virgo.
Además comunicó la intrigante entrada de un seudoasteroide.
En el
gabinete de Axel, el equipo de Chian-Zu mostraba gráficos muy elaborados
mediante distintas teorías. Se basaban en lo deducido por los mensajes de Nen y
las comprobaciones de hologramas recibidos.
El mensaje de
Sixta, era una distorsión de algo que el día anterior habían recibido de Nen.
Esperaban que
en tres días, la nave de Nen y Zeón, se posara en algún Puerto de La Isla. Por
ello, estaban preparando un viaje para verse todos allí en la programada
Convención de científicos. Lo anunciado por Nen, era sumamente preocupante y
las decisiones de máxima responsabilidad para toda la Humanidad.
Algunos,
reacios en otorgar tanta importancia a los últimos mensajes, atribuían a los
exploradores una incapacidad transitoria producida por narcóticos. Estaban
dispuestos a admitir locura de los viajeros por causa desconocida, antes que haber
realizado un viaje temporal, a los inicios de la Historia Isleña.
A pesar de
las reticencias, toda la documentación, estudiada por Axel y el equipo de
Chian-Zu, una semana después se daba a conocer por ellos ante todos los
científicos. Pero los protagonistas Nen Y Zeón, ni se presentaron, ni se supo
nada de ellos desde el último mensaje recibido por Sixta.
Esto motivó
que tomara fuerza, relacionar el último mensaje con la desaparición de la nave
y sus ocupantes, con el meteoro entrado en la atmósfera de Renova.
Tendría
explicación lógica en el supuesto de que su locura les incapacitara para
controlar la nave.
Confirmarlo
les llevaría mucho tiempo ya que deberían peinar todo un Océano. Aún así, los
restos pudieran resultar irreconocibles.
Los tres planetas
habitados de Alfa, quedaban sujetos a controversias que se mantuvieron durante
meses. Finalmente se optó por preparar una exploración especial dirigida a la
región sospechosa, por tres equipos con normas muy estrictas. La planificación
de elementos de medición a traer a bordo, la logística para un año de viaje ida
y vuelta, e instrucción a nueve cosmonautas voluntarios, se realizaría con el
máximo rigor y aplicación de la más avanzada tecnología.
Como a pesar de tan meticulosa planificación, los nuevos
exploradores regresaron sin ningún resultado,
poco a poco se olvidó la aventura Nen-Zeón, dando como válida la presunción de
locura.
Sin embargo quedaba un grupo de científicos reservando su opinión, pues temían que las coordenadas en que Nen-Zeón vieron la
fantasmagórica presencia del Seudo Planeta Tres, de existir aún, lo sería en
coordenadas incluso tres años alejadas. Pues ni siquiera podían estar seguros del
movimiento de las demás Galaxias.
No teniendo premura alguna por investigar nuevos Mundos, se relajaron las actividades Galácticas. El Éxodo producido por la Humanidad, llevándola a recorrer su Periplo Cósmico, tenía un acicate. La perentoriedad de la existencia de sus Estrellas. Ahora sabían que Alfa tenía una vida por delante de Ocho mil millones de años.
Los sucesores Isleños, podían disfrutar de un largo periodo exento de amenazas galácticas.
La vida siguió por muchos milenios en los tres Planetas
de Alfa. Las hostilidades frecuentaban entre líderes coetáneos por motivos de
poder. Sin embargo el recuerdo del Héroe Axel y su desaparecido hermano Nen,
prevalecía ante los contendientes, desvaneciendo intrigas.
Renova y Virgo, fueron verdaderos paraísos a los que visitaban
constantemente los Isleños, el Edén de Renova y el Heaven de Virgo. Y como
Museo de la Humanidad, unos y otros visitaban la Isla, habitáculo de las Ciudades
ancestrales.
Quedaba en la memoria de todos, la idea de la imposibilidad
del BUCLE TEMPORAL, o ¿ alguien se resistía a admitirlo?.
Saludos de Avicarlos.