lunes, 31 de diciembre de 2012

Colonización de Renova


COLONIZACIÓN DE RENOVA 2ª parte

Cap 35

Como imaginaba Axel, la comisión para el desarrollo de la colonización, dio su beneplácito a los representantes políticos para realizar viajes regulares a Renova.
Y los políticos entusiasmados ante la avalancha de beneficios que obtendrían.
Las fábricas de todas las Ciudades aceleraron la producción de naves ligeras aptas para 500 pasajeros más 150 de tripulación. Se programaron inicialmente dos viajes semanales para Renova y tres para Virgo.
Los tres de Virgo hacían escala en el Asteroide para el relevo de los Astrónomos.

Sin embargo, pronto ampliaron rutas al haber demanda de los habitantes de Virgo, para ellos ser turistas en Renova.

Esto lo intuyó Axel, desde el momento en que vio el Interés de los isleños por los habitantes de Renova. Y lo había comentado en privado con Sixta.

Este conocimiento previo, dio luz a Sixta para urdir una fuga y evitar la reprimenda lógica a recibir de Axel. Los dos años juntos, tuvieron sus altibajos. Se traslucía que Axel, seguía enamorado de Astrid. Y no podía cambiar estos sentimientos ya que tampoco eran tan fuertes los que sentía ella misma. Fue por envidia y egoísmo que enemistó a Axel con Astrid y ahora se sentía culpable y cobarde.

Desapareció por varias Ciudades, durante el tiempo preciso para captar a seis colegas conocidos, con los que propuso una estrategia. Serían los primeros Colonos Isleños de Renova.
Ella partiría en el próximo viaje para Virgo, entrando en la nave de polizón. Dejaría una nota escueta de arrepentimiento, implorando la perdonara Axel, sin mencionarle sus intenciones ni paradero.
Los seis prosélitos, seguirían sus pasos como colonos de Virgo en otro viaje. Una vez reunidos convencerían a la tripulación de una de las naves de Virgo para partir todos hasta Renova.

Tenía localizado un lugar paradisíaco, a orillas del lago donde habitaban los primates. Allí construirían el primer Hotel VIP con el máximo confort. Los Isleños y los Virginianos al producirse el Bum turístico, inevitablemente les visitarían. Una vez recorridos los poblados disfrutando de lo que brindaba aquella ruda cultura, les invadiría una enorme necesidad de descansar en cómodos aposentos y practicar deportes acuáticos.
La enorme extensión del lago, permitiría también realizar cruceros.

El proyecto ambicioso, no pasaba desapercibido por tantos colegas como la escucharon. Pasarían de vivir en las limitaciones de las Ciudades artificiales a una bella zona selvática. Además de las comodidades ciudadanas, el hotel les ofrecía el contacto con la Naturaleza tan apetecido.

La entrevista de Astrid con Axel, resultó muy tensa, entristeciendo a Axel, que jamás hubiera imaginado a Sixta como una sibilina. Era una ayudante dócil, buena maestra para los nativos Renovanos, y creía que le profesaba amor. Al hallar el mensaje de despedida, el mundo se le vino abajo.
Todo había sido un engaño para separarle de Astrid que también fue engañada. Rehacer los dos años perdidos, no era cosa fácil. También había un tercero afectado: Chian-Zu.

Abatido, no le importó ignorar por donde andaría Sixta. Incluso pensó que mejor no tener que soportar una entrevista agria llena de reproches.

Ø - - - - - - - - - - - <

Nueve años después, dos de las parejas culturalizadas, en La Isla, tuvieron más hijos,  definitivos ciudadanos Isleños. De los seis niños, anteriores que ya eran unos mozalbetes, dos mostraban cierto retraso en las enseñanzas, respecto a sus colegas de estudios, pero con todo, aprobaban las asignaturas impartidas. Los cuatro restantes, mostraron interés en mecánica e ingeniería y sus padres les animaron a proseguir en esta especialidad. Les acompañarían al término de sus estudios regresando a Renova donde serían los maestros de sus hermanos.

El Hotel de Sixta, se inauguró con el nombre de EDÉN. Ya antes de inaugurarse  había demanda anticipada de estancias semanales. Los viajes realizados regularmente, intensificaban el contacto de los nativos con los isleños y los Virginianos. Muy cerca del hotel se preparó un explanada como aeropuerto Espacial. Y de allí con transportes comunitarios, los visitantes turistas podían recorrer a discreción los caminos que ya unían a ocho poblados.

Los nativos ofrecían sus obras de arte, prendas folclóricas y apetitosos manjares naturales. A cambio los visitantes ofrecían instrumentos, aparatos, artilugios magnéticos y demás artículos que les pedían ya que los conocían por los ordenadores alimentados con información copiada de las Bitácoras de las naves.
Los poblados fueron especializándose en su ocupación, produciendo bienes de consumo semiindustrializados.

No faltaba una escuela en cada uno. Y el buen entendimiento entre los nativos y los visitantes, logró que pocos años después, ya eran los nativos quienes alternaban viajes a Virgo y a La Isla.

Pero tuvieron que pasar otros cinco años, antes no se hospedaran en el EDÉN, Astrid, Axel, y Chien-Zu con su compañera Chicha.