sábado, 31 de marzo de 2012


Parejas Perdurables IIª parte

Sigue 15
Fue un espectáculo en el que resulté el productor, realizador, presentador, y actor protagonista. La barra del Restaurante de Tarter convertido en púlpito. Y alineadas en filas las sillas sin las mesas, fueron ocupadas por un centenar de personas, incluidos los vendedores, Tere, hijos y Cesc, el fontanero adquirente del servicio de agua.

Un espectáculo para anunciar la creación de una Asociación de Propietarios. Atenderían mediante una cuota mínima, los gastos generales de conservación instalaciones en Tarter. Y cada asociado, además abonaría el importe de su consumo eléctrico. También correrían a su cargo particular, los gastos del material e instalación del contador homologado por Fecsa.

Con Roano de secretario, pasé lista, les leí los estatutos y pedí que firmaran la adhesión. A continuación pedí voluntarios para presidir a la futura Asociación. Tres levantaron la mano. Puestos a votación, la Sra. Casal fue la que mas manos levantadas a su favor logró.

La felicité y me creí al fin libre de más tratos relativos a las instalaciones y servicios en la urbanización.
No bastaba. Había que legalizarlo acudiendo a un abogado firmando pomposos documentos. Se convenía entre mi Sociedad y la Asociación, la cesión de los derechos de uso de la línea eléctrica para sus asociados.

Aceptaron nueve letras por un tercio del valor que me costó, para abonar en tres años con fracciones trimestrales. Ruina económica, ya que se esfumaban los beneficios de los años transcurridos. No me importaba, con tal de sacudirme responsabilidades que me ataran indefinidamente allí. Tere me presionaba para que diera por finalizada la actuación de colonizador.
  • Ya ves Tere que con esta Asociación y con Cesc, ocupándose de los servicios agua y electricidad, pronto me libraré de las exigencias de los propietarios. Lo único que durante un año, todavía tendré que mantener el contrato con Fecsa a nombre de Tarter, hasta que se pueda realizar el traspaso legal.
Tampoco esto bastó. Tuve que apechugar también con la recogida de basura, y harto estaba de que no se hiciera cargo el Ayuntamiento
Con las ventas de Santa María y las letras aceptadas por la Asociación, casi se podía cancelar lo hipotecado. Sin embargo, solo me abonaron las dos primeras letras. La tercera produjo un rojo en mi cuenta al llegar impagada.

A partir de aquí la relación Propietarios Asociados y mi sociedad de Tarter, de tirante, pasó a agresiva. No pude terminar de cancelar hipotecas. Roano vendió más parcelas suyas que mías, con lo cual, tenía que gastar los últimos cartuchos económicos que eran los solares de Esquerdo en Santa María y nuestra propia vivienda.

El Restaurante que había pensado en legarlo gratuitamente a la Asociación, lo hipotequé. Con ello, paliaba la definitiva desatención de las letras por parte de la Asociación.
Esto sumado a que las ventas no tomaban el ritmo esperado, con tres años más desencadenaría reacciones bancarias y litigios con la Asociación.

La Sra. Casal, dimitió como Presidenta, por la zancadilla que le puso Pelón, el vendedor de Roano. Consiguió que le nombraran a él, prometiendo que con su actuación, nadie tendría que pagar más hipotecas. Que con una cuota razonable, administrada por él, no solo se abstendrían en el pago de las letras pendientes, sino que interpondría una demanda contra mí por seguir vendiendo solares que no colaboraban con las cuotas de la Asociación.

Lo absurdo, en casos de litigios es frecuente que triunfe. Si no se consigue con documentos legales se consigue con falsos. Si hay suficientes beneficiarios del producto de las estafas, su unión logra el milagro de demostrar ante el Juez, que el acreedor es el deudor.

Aborrecido por la actitud de aquellos clientes que fueron en su día fueron agradecidos por permitirles ser propietarios de bienes raíces, correspondí con mi abandono de Tarter, haciendo feliz a Tere.
Sin embargo, aquél invierno no tuve más remedio que entenderme con Cesc, para mejorar la red de agua. Las temperaturas de diez grados bajo cero durante dos semanas seguidas, causaron destrozos.

miércoles, 28 de marzo de 2012

Parejas Perdurables IIª parte




Sigue 14 bis

Los anuncios insistentes sobre los beneficios terapéuticos del agua de Cardó, culminaron con los videos sugestivos que TVE cinco veces al día pasaba en sus programas.
Se trataba de la explotación de las aguas minerales de antiga fama, que motivaron convertir un antiguo convento, en Balneario entre los años 1940 y 1967.
Las instalaciones, ya no correspondían con la modernidad y tuvieron que cerrar, pero en 1974, se transformó en planta embotelladora.
La publicidad, hizo mella en nosotros. Tere y yo decidimos visitar tan agreste lugar con los cinco pequeños, ya que los dos mayores pasaban olímpicamente de picniks familiares.


Esta imagen en paraje tan agreste resultó un imán, no para adquirir botellas de su agua, sino para contemplar el paisaje desde allí mismo y conocer su historia.

Apetecía, por cuanto una carretera de nueve kilómetros y escasos cinco metros ancho, subía hasta el complejo facilitando el acceso y su visita.

Olvidando provisionalmente los problemas de mi creación de la Entidad administradora electrica de Seguer, salimos una mañana dominical desde Seguer, hasta Rasquera, población al pié del macizo del Cardó.
Mientras subíamos me entró el miedo ya superado que tuvimos al subir por el estrecho camino rodado  que conducía al Dolmen cerca de Aïgues Tortes.
No se trataba ahora de camino, sino que era carretera asfaltada sin problema para cruzarse con vehículos usuales. El miedo me entraba por haber visto en los videos, a los trailes gigantescos que transportaban las cajas de agua embotellada. Si nos cruzábamos con uno de ellos, el problema estaba servido.

-Pero Carlos, que hoy es Domingo.

-Y ¿qué?.

-Que la embotelladora, estará cerrada. No van circular trailers para simple paseo.

Aplastante razonamiento. Fuimos serpenteando por la carretera, hasta el final forzoso. Lo impedía una verja metálica, copando todo el vial. Más allá, una explanada resultaba ideal para aparcar, darnos una vuelta y regresar después de gozar de la panorámica desde aquél balcón natural.
No pudo ser. Por lo visto si cerraban las instalaciones de embotellamiento, allí no quedaba nadie. Cerrado para todo tipo de visitas. Y el problema ya surgió. ¿Dónde aparcar?. ¿Dónde girar para retroceder?. Cinco metros de calzada, para mi mercedes, eran un grave impedimento.
Y el coche allí en medio, entorpecería a otros cándidos como yo, de haberlos habido. Lo lógico hubiera sido un simple rótulo avisando de camino cerrado al pié de la montaña.
En principio me desentendí del problema, postergando la solución para el momento definitivo de optar por el regreso.


Túnel de entrada angosto, dando idea de lo que vendrá a continuación.

Montamos la mesa plegable, sacamos el avituallamiento degustamos la comida, recogimos los desperdicios para que sirvieran de lección a la prole. A continuación, a pie realizamos excursión sacando fotos de lo que más nos llamó la atención y....... Llegó la hora de la verdad.
Tragando saliva, con media docena de maniobras, llegué a poner el coche atravesado en la calzada. Pero de ahí, no pasaba. Sin encomendarme a ningún santo, obligué al vehículo actuar de tractor, forzando el margen de la carretera y con otra media docena de maniobras, lo dejé ya enderezado a punto de marcha. Obtuve un aplauso unánime, proveniente del público de seis personas, que contempló mi heroicidad.

-Esta vez Carlos te has salido con la tuya sin ningún rasguño, pero cuando hacías las maniobras marcha atrás, estuve con el corazón en un puño, temiendo que te despeñaras.



Una de las ermitas diseminadas por la propiedad de Cardó.




Fuente que ya no mana.


A pesar del chasco que nos llevamos, nuestra ansiedad por pisar el suelo que la televisión nos sedujo, quedó satisfecha. Años después, en 1989 la propiedad adquirida por Leche Pascual, clausuró las instalaciones.
Por lo visto, los años de sobreexplotación del manantial, redujo su caudal, hasta límites no rentables. Tampoco resultaba el agua con las propiedades de antaño. Así como la explotación extra de los niveles freáticos cercanos a la costa, motivan su salinidad y pérdida de potabilidad, la del acuífero de Cardó, reducido el tiempo de permanencia de las aguas en su nivel freático, no disolvía las sales que le otorgaron su valor terapéutico.
Actualmente en 2012, se proclama una próxima conversión de este paisaje con un hotel de campanillas, no apto para mendicantes.

martes, 20 de marzo de 2012

Parejas Perdurables IIª parte

Sigue 14

No entendía. nada. El cura, desde el púlpito, mencionaba a dos familias, que a saber si alguien sabía de quienes se trataban. Desde luego, ni Tere ni yo, quizá por ser feligreses accidentales, pues era la primera vez que visitabamos esta Ermita. Tampoco era demasiado numeroso el auditorio. Allí estaba Roano, con su mujer e hijo. Y no más de otras veinticinco personas.
De completarse el aforo de oyentes de la Santa Misa, sobrepasaría el centenar de feligreses.


-Pido explícitamente público perdón a la familia........ y a la familia....... tal como ya les pedí personalmente.....

El cura, seguía con su perorata ininteligible que por esfuerzos que hice, no pude recordar a cual pasaje Bíblico pudiera referirse. Claro que mis lecturas religiosas, las tenía con los años bastante olvidadas.

Lo comenté al salir con Roano. Él tampoco lo entendió, pero quedaba claro que no se trataba de ningún sermón Bíblico, sino algo privado entre el Cura y las familias citadas. ¿A qué venía esto?.
La Ermita, de renombrada por su antigüedad y con la advocación de un Santo venerado en la región, la visitamos al saber que en las fiestas señaladas subía el Cura  a ofrecer el Santo Sacrificio, para los devotos.
Aguardamos finalizado el ritual, a que saliera el Cura y le abordamos para entender el misterio.

El hombre, cariacontecido nos contó el suceso de hacía un mes.

-Tras la semana de lluvias, en pleno Agosto, como recordarán Uds. el día mencionado salí de la Iglesia cumplida la Misa matinal.
Me entró un gozo irrefrenable al observar un sol esplendoroso. Ávido estaba de poder ir a la playa. Mi mayordoma convino conmigo era de aprovechar por los pocos días que nos quedarían de buen tiempo para zambullirnos en el mar.

Tan bien nos sentimos en la playa, que incluso nos quedamos a comer en un chiringuito, pero al regresar por la tarde, a la puerta de mi casa se encontraba una comitiva con una pareja de novios, aguardándome.

Al pobre, llegado a este punto recordado, le asomaron unas lágrimas. Los novios y sus familiares que allí en peregrinaje se hallaban eran los que con dos meses de antelación, le pidieron para tal día  a las dos de la tarde celebrar el desposorio. Sería en la intimidad y el propio cura invitado a comer con ellos. 

Dios le nubló la memoria y lo más lejano que podía haberle venido en mente aquella mañana era tal compromiso. Quería fundirse por el quebranto infringido a dos familias, que pronto fueron noticia de los lugareños. El Cura se autoinfrinjió la penitencia de durante un mes en todas sus locuciones desde el púlpito, daría a conocer su culpabilidad, remarcando la no intencionalidad de oprobio para ambas familias. Por ello una y otra vez pedía perdón.

Después de cambiar nuestras impresiones, Roano, quería darme a conocer las buenas noticias.
Cerró trato con cinco clientes de Santa María, con lo que creía salvado el problema de la financiación de la red de Baja tensión en Tarter.
Me puso entre la espada y la pared. No podía alegar que crear una Asociación para el suministro de la electricidad, no era bien visto por Tere. ¿Es que a él, le hubiera importado un bledo?.
Pues cedí y apechugué las consecuencias que siguen vigentes, treinta y tres años después.

jueves, 15 de marzo de 2012


Parejas Perdurables II parte.

Sigue 13 bis

Siguiendo nuestro paseo descendente por el bulevar, ambos dirigimos la mirada a la bocacalle de lo que sigue siendo el sumum del tapeo. 

Discurríamos de novios por las numerosas tascas que una al lado de otra, se ubicaban por las dos aceras. En cada ronda no entrabamos en más de tres de las aún no visitadas. Así, en pocas semanas las conocimos todas. Recordaban a las Madrileñas, y las de Alcalá pero con un precio del tapeo quintuplicado. Era lo que obligaba a que nuestras rondas fueran así limitadas.
Y Tere hacía gala de buena catadora de tapas con el clásico vino tinto. Qué lejos se veía aquel proceder, cuando ahora su metabolismo, no le admite ninguna clase de alcohol.

Quizá tuvo que ver la aventura que corrió con su amiga ya ausente, Anamari. Creyéndose mayorcitas, tuvieron la idea de experimentar con una botella de Cava.
Se bebieron un domingo por la mañana antes de dirigirse al Palacio de la Música, como era habitual para los melómanos, una botella entera cada una.
Les dio por reír, cantar y moverse con evidente excitación. Su hermana, avisó a su madre que:

-Mamá, Anamari y Tere están tontas. Ríen sin más.

Su madre, entendiendo lo ocurrido viendo que daban traspiés, lejos de castigarlas, decidió acompañarlas al concierto dominical, con la esperanza que un poco de paseo al aire libre, lograría suavizar los efectos de la “mona” que pillaron.

En el vestíbulo del Palacio de la Música, madre y niñas, sostuvieron una benéfica conversación, en la que les quedó claro que de no reprimirse enmudeciendo, no traspasarían la entrada.

A Tere y a Anamari, esta amenaza las contuvo, pues podía más el deseo de ver actuar a su ídolo, Primer violín que años después fue el Director de la Orquesta del Palacio de la Música, que los efectos ya menguados del Cava. 
Y debían entrar cuanto antes para ubicarse en las butacas preferentes que las distanciaban de él, a no más de tres metros.

Frente al Liceo, Tere rememoró numerosos chascarrillos que transcurrieron en el aseo de señoras. Durante los entreactos las damas se concentraban en la antesala de los excusados. Aguardando  retretes libres. Mientras, comparaban los sones que emitieron los instrumentos musicales en el escenario, con los que salían de cierto habitáculo con una inexplicable profusión reiterativa atronadora.
Supusieron que alguien, mejor se hubiera quedado en casa que asistir a una ópera, hallándose con desarreglos intestinales.

En cambio yo, hacía memoria a la primera vez que en Olot, me contaron la masacre provocada por un terrorista al lanzar una bomba a  platea, desde un palco.
Y que en una ocasión se quemó teniendo que ser remodelado. Pues en aquél día de paseo con Tere, tampoco podíamos imaginar que años después se produciría el segundo y más devastador, arruinando a los propietarios, teniendo que reconstruirse con técnicas avanzadas, por las aportaciones de los socios de nueva Entidad.

Fachada


Desde el escenario



-Mira Tere, este es el edificio de Tabacos de Filipinas. Aquí trabajaba el padre de Prat.

-¿Qué se sabe de él?. Era un joven dinámico y alegre. No mereció que le perjudicaran sus propios socios. Como a tí.

Mejor pasamos a contar cosas agradables ya que el tema solía derivar a acusaciones. El lector entenderá por lo narrado en la primera parte de esta historia.

De pronto se hizo un hueco en el bulevar. Nos encontrábamos ya en la parte final de las ramblas y allí la gente no se agolpaba. No había tiendas, ni pintores caricaturistas, ni estatuas vivientes. Era puro tránsito entre los viandantes que se dirigen al puerto, o a contemplar el monumento a Colón y los que volvían de cruceros turísticos, o simplemente de un viaje con las recreativas Golondrinas merodeando el puerto hasta el restaurante del faro.

Como si lo reviviera, proyecté mentalmente la película del día que en escapada nocturna estudiantil, allí estaba mi tío Siset. Mejor dicho ya no era mi tío, pues dejó de serlo al fallecer mi tía con la que estuvo casado.

Tenía la voy cantante, ante un corro de cinco parejas. Todas de edad entre mediana y algo más. Al oír por su conversación mentar Llagostera, me llamó la atención ya que se trataba de mi ciudad natal. Entonces me di cuenta que aquel señor era mi antiguo tío. Persona querida por mí que solo me provocaba recuerdos de dulce nostalgia, por el trato recibido. 

Era herrero y en una ocasión me enseñó como trabajaban el hierro en la fragua. Cierto día al regresar de su trabajo, me regaló un aro para que jugara con él. Y me enseñó como mantenerlo rodando trechos largos por la calle. En otra ocasión me obsequió con un barquito de corcho, con los herrajes complementarios que le hacían parecer un barquito de verdad.

Enfin que tuve ganas de inmiscuirme en su corro, pero me contuve. Yo le conocía perfectamente a él, cosa que evidentemente no se daría la recíproca. Habían transcurrido catorce años desde mis cuatro que tenía al partir de Llagostera con mis padres para residir en Olot.
Las parejas que le acompañaban para mí desconocidas, deduje que eran invitados por sus segundas nupcias. ¿Qué hubiera aportado yo ante diez personas que festejaban una boda en Barcelona, interrumpiendo su charla?.
Desistí, pero sigue quedándome la desazón por no haberme dado a conocer.

Y allí enfrente teníamos el famoso Museo de Cera.

-Vamos a entrar Tere, dicen que van reponiendo figuras a tenor de los acontecimientos de actualidad. Algo así como en “Los crímenes del museo de cera”.

-Pues no me seduce. La película ya no la ví. No me gustan las de terror.

-Pero aquí no hay asesinos que que te enceren.

Entramos al Museo y cuarenta minutos después ya volvimos a la las Ramblas.

Entrada al Museo
Sala principal

Napoleón y Josefina
Marco Antonio y Cleopatra

Patio entrada


                                                Dalí


Otro recuerdo de mi etapa estudiantil la teníamos también allí. Se trata del Quiosco - bar minúsculo, quizá el más pequeño de mundo. La Cazalla, en 
Arc del Teatre.

                                            Estado actual


Mis recuerdos son del año 1950. Y en aquél tiempo, ya era famoso este minúsculo habitáculo, (kiosco) en el que lo único que se tomaba era la Cazalla en la misma calle bajo el Arco del Teatro. Una copita de anís ( 50 º alcohol) orujo poco dulzón, que se acompañaba con una cereza confitada (haciendo el efecto de la guinda en vermouth y pasteles). 

Se popularizó, por haber sido el centro básico de partida de los arrieros desde 1912. 

Su desayuno de madrugada era este abrasivo brebaje. Les otorgaba la euforia necesaria para emprender su jornada laboral. 

Lástima no se posea una foto original de la época. La actual es la que ofrece a los jóvenes clientes noctámbulos celebrando los populares botellones. 
El bar no dispone más espacio que lo que le permite un mostrador de dos metros y medio, y en una profundidad de un metro y medio tras el mostrador, sirve el barman. 
No hay mesas, ni aseos, ni salas. Se toma el chupito, o la cerveza en plena calle, aprovechando este pequeño tramo cubierto por el arco que es piso de viviendas.


Llegados al monumento de Colón, subimos hasta el atalaya, ya que esta vez, funcionaba el ascensor.




Desde arriba, se divisaba una panorámica de Barcelona espectacular.
A nuestros pies, el Palacio de Capitanía, donde al finalizar la carrera, los universitarios recogíamos el embarque para nuestros destinos. Los seis meses obligados de acuartelamiento ejerciendo de oficiales de complemento.
El chasco mayúsculo me lo llevé cuando me destinaron a Alcalá de Henares, habiendo solicitado Jerez de la Frontera.


                                  Palacio de Capitanía
Y avistamos el Puerto en su totalidad. En el horizonte, los barcos que no entraban por carecer de permiso de atraque. A  las Golondrinas que realizaban el recorrido por el interior del Puerto, hasta el Restaurante del Faro. Y como no, la Carabela Santa María, en el embarcadero, donde a continuación la abordaríamos.




Embarcadero y vista del Palacio de Capitanía.


La alegría mantenida por este agradable paseo se hubiera paliado de realizarla al año siguiente, en que precisamente el dia de mi cumpleaños, se produjo el suceso más macabro de toda la historia del Puerto.

http://hemeroteca.lavanguardia.com/preview/1977/01/18/pagina-1/33627487/pdf.html

Una motora de EE UU, cuando iba a reincorporarse al Buque Insignia  con cientocincuenta marines a bordo, chocó con un pesquero vasco, pereciendo ahogados cuarenta y nueve.


Ajenos pues a esta desgracia, subimos a cubierta de la perfecta recomposición de la Carabela de Colón.
Tere se formó idea del calvario que debieron sufrir la veintena de marineros aguantando las inclemencias del tiempo durante tres meses en una superficie tan exigua.


Habiendo atardecido, tal como le prometí a Tere, entramos al Restaurante Amaya, para cenar.


Terraza de Amaya

Era el típico resturante Vasco, que por aquél tiempo se consideraba la cocina mas chic. La cocina vasca tenía tanta fama, como la actual de Ferrán Adriá.
Pedimos los platos recomendados por el camarero, recordando como el cuarteto Xey, en sus actuaciones daban publicidad, con su " Buen menú"


Fue una suerte tener ya los niños creciditos, pues teníamos por delante una noche para disfrutarla como broche de oro yendo a ver un espectáculo teatral, que ya nos resultaba lejano.
Las Ramblas de Barcelona, han resultado un compendio de lo que puede verse por toda la Ciudad.



lunes, 12 de marzo de 2012


Parejas Perdurables II parte.


Sigue 13

Rambla canaletas

Fuente de Canaletas
Alrededor de esta fuente, tradicionalmente, los culés (forofos del club de fútbol, Barça), se reúnen  para celebrar los éxitos en los partidos memorables. La tradición remonta a los años 1930, cuando los seguidores iban a informarse sobre los resultados a la redacción del diario deportivo La Rambla, situado justo frente a la fuente. A la puerta de entrada, se colgaba una pizarra con el resultado de los partidos del día.
Poco a poco se ampliaron estos festejos y reuniones por motivos futbolísticos, a otros políticos. Los resultados a veces acababan con comportamientos irracionales de algunos desaprensivos, que obligaban a las autoridades intervenir con contundencia.

Justo enfrente de la fuente, se halla el bar Canaletas.

-Mira Tere como han cambiado al bar Canaletas. Te invité por primera vez de novios a que probaras una manzanilla y el bocadillo especial de variados embutidos. Ahora convertido en cafetería, no tiene la gracia de antaño.

-Y lo buenos que eran aquellos bollos con la mezcla de sobras de jamón, chorizo, longaniza, butifarra, tocino, cabeza de jabalí y a saber que más. Todo triturado ofrecido a un módico precio.

- Ahora con la reforma del local, solo es apto para los finolis. Empezando por la consumición mínima que ya no es asequible a los estudiantes. 


Nos paramos ante el escaparate de al lado. La antigua sastrería Modelo.

-Tenía noción de esta sastrería famosa, por lo relatado por mi padre de los años de su juventud. Fueron los Hermanos Pantaleón, que iniciaron la confección pret a porter. La calidad de sus trajes a medida, era reconocida, lo que motivó convertirme en su cliente.

Bueno realmente fue por una coincidencia afortunada. Los estudiantes no podíamos pagar trajes a medida, así que elegíamos entre las ofertas de los confeccionados a bajo precio.
En mi primera elección, las mangas de la americana resultaban cortas. Trajeron otra medida, cuyos pantalones eran propios de un barrigudo.
Otros pantalones no me llegaban al tobillo y ….
El sastre se dirigió a mí con una proposición que no podía rechazar nadie.
Me dijo: 
“Caballero, si se brinda a que le tomemos sus medidas y viene tres días para comprobar los patrones que formaremos, tendrá este traje a medida, cobrándole lo mismo que el de confección.”

Estaban convencidos de que la juventud por aquellos años, ya difería de la habida antes de la guerra civil. Las generaciones de españoles, especialmente los catalanes, eran más altos y atléticos, por lo que los patrones usados, ya no respondían a una mayoría de jóvenes mas cercanos a mi figura.

Así que a partir de entonces pude ir año tras años a adquirir mis trajes de confección, que en realidad eran los de mí medida, sin problema.

-Mira Carlos, si no hubieras sido alto, como siempre imaginaba a mi príncipe azul, dudo que hubiese llegado a ser madre de siete hijos.

Pasamos a la acera de enfrente por cuanto Tere, rememoraba los tiempos en que iba a la Radio para ver actuar los artistas con los seriales.


Historia de la primera radio Barcelona EAJ1

http://www.youtube.com/watch?v=48KEfL-OYus

La estación pionera fue EAJ-1 Radio Barcelona, llamada la emisora decana de la radio española por ser, precisamente, la más antigua. La nomenclatura EAJ-1 hace referencia a los códigos de los radioaficionados, auténticos artífices del nacimiento de la radio. E por España, AJ porque designa a las estaciones de Telegrafía sin Hilos y, por razones obvias, 1 por ser la primera.

-¿Ves?. Sigue aquí, el café Moka donde mi padre nos aguardaba a Anamari y a mí, a que saliéramos de la radio que estaba en el primer piso. Él no subía con nosotras, pues prefería charlar con los amigos en sus habituales tertulias.


A continuación casi al lado, el edificio del SEPU, le evocó a Tere más recuerdos.


-Rosa, de soltera trabajaba de cajera en SEPU. ¿Recuerdas?. La visitamos en nuestro viaje a Santillana de Mar.

Tal cual, se trataba de la hermana mayor de su íntima amiga Anamari. Casi se le humedecieron los ojos a Tere, al evocar tiempos pasados. Anamari, había fallecido víctima de un tumor cerebral solo hacía un año.

Estos grandes almacenes, habían popularizado el eslogan “Quién calcula, compra en sepu”.
Sus siglas significaban Sociedad Española de Precios Únicos. Yo también fui cliente en ocasiones, como para regalos de Reyes destinados a nuestros hijos.
Siguiendo por la misma acera paré ante un escaparate de joyería.

-Mira Tere. Aquí adquirí tu ópalo agua marina flotante sobre el anillo de oro blanco.

-Pues más triste me siento con lo que me encariñé con él.

El robo de joyas del que fuimos víctimas, fue un golpe bajo, por los recuerdos y sentimientos que ellos emparejaban. Sin embargo no le dolía el valor dinerario, sino aquella belleza que jamás volvimos a ver en escaparate alguno de joyería.

Pasamos a la rambla para seguir recordando que aquellos bancos laterales para descanso de viandantes, antes eran simples sillas vigiladas para cobrar alquiler a los usuarios.

Luego ya vimos los corros formados ante las estatuas vivientes.

Era un verdadero espectáculo. Los artistas, previa concesión Municipal, posaban como estatuas con la más varipinta originalidad.
Algo que llamaba la atención al renovarse continuamente los actores. Éstos, más que por llevarse unas propinas, les interesaba familiarizarse con el público para posteriormente estar curtidos en actuaciones en teatros. 




El “Tricicle”, hizo sus pinitos aquí y se convirtió posteriormente en un afamado grupo, que llenó escenarios Nacionales y Americanos. Incluso intervinieron en una serie televisiva, titulada “Tres estrelles”




Pasando por La Boquería, recordé como prohibieron a los vendedores de insectos comestibles, por protesta de los comerciantes adyacentes a su puesto. Sin embargo unos años después volvió a aceptarse en base a que sus comestibles “bichos“, se exponían y vendían envasados en tarros transparentes.







Este mercado, el mayor y más completo de Barcelona, es donde se hallan los comestibles de mejor calidad, así como extensa variedad local, regional, hispana y extranjera.

Llegando a la rambla de Las Flores, nos entretuvimos contemplado lo que era un longo jardín de bellas flores. Seguía igual la tradición de este mercado multicolor.




Y de allí le enseñé a Tere lo que antaño era “La casa de barrets” (Casa de sombreros). Actualmente ya no existe ni en este enclave ni con esta denominación.

Uno de los primeros establecimientos abiertos, mostraba en su escaparate variedad de sombreros. Era en realidad un burdel disimulado. La decoración, interior de gran lujo, no casaba con el precio unitario de cualquiera de los sombreros.
Si el caballero visitante presunto cliente, pagaba el precio módico justo, la dependienta, entendía que tal persona era un despistado, por lo que le entregaba el sombreo sin más. Pero si el cliente era un “avisado”, mostraba un billete de los gordos, por lo cual, la dependienta, le pedía que subiera al piso interior, en que una cajera le daría cambio.

El cambio que le daba la “cajera”, era un muestrario de señoritas de compañía para su elección.

Una vez extendida la práctica de tales establecimientos, quedaron ya bautizados con “Casa de barrets”. Y perdura tal denominación, aplicada con diversas acepciones de negocios oscuros.